Me esfuerzo por dar una cierta autonomía y protagonismo a unos objetos; por observar la potencia de cambio y de movimiento que existe en todo; por comprobar, una y otra vez, que una cosa más otra cosa se convierte inevitablemente en una cosa nueva. De aquí surge una serie, por ahora inacabada e intitulada, de pequeñas piezas que emergen al contemplar la relación que toma un ventilador con otros cuerpos, tanto vivos como inertes.